Todas las entradas de: Tato Contissa

Bariloche Burning

A nadie se le ocurriría pensar que la situación que describe el film Missisipi Burning / Missisipi en Llamas, fuese un caso de “inseguridad”, según los manuales mediáticos de la distorsión y el reduccionismo de este principio de siglo. Claro, en 1961, cuando ocurren los episodios de violencia en el sur estadounidense, y en 1989, cuando se estrena el film, el grupo Clarín tenía muy poca incidencia sobre los episodios.

Distinto es hoy en Bariloche, Río Negro, Argentina, cuando un caso final de escisión social provocado por un diseño económico de exclusión implantado en la dictadura, alimentado por la desidia política de 27 años de gobiernos radicales de los cuales diez fueron los arrasadores años del menemismo, tiene en la ciudad la voz siniestra del grupo Clarín en el único canal de aire y todo el sistema mediático cautivo de la economía publicitaria del modelo. Más los infelices, los ventajeros, y los fascistoides que hay en cualquier sociedad que supere los cien mil habitantes.
La práctica es la de siempre, jibarismo informativo: técnica de reducción de hechos a los moldes estereotipados que sirven para la consagración de los prejuicios sociales y raciales, criminalización de la pobreza, apelación al miedo, incitación a la violencia desde una hipócrita condena a la violencia. Nada nuevo.
Pero: algo nuevo.
Creo que esta semana, mañana a más tardar, el caso Bariloche se va a convertir en una blumergización rediviva de la amenaza de la inseguridad como consecuencia del “gobierno de mierda que tenemos a nivel nacional”.
Todos saben que el grupo está desesperado por razones que bien valen una desesperación: potencial prisión para la señora de Noble, avance sobre el caso Papel Prensa, Ley de Medios descongelada por la Corte, más los riesgos mundialistas de que la alegría no sea sólo brasilera. De manera que un caso como el caso Bariloche acomoda la piedra en el zapato de la sensibilidad nacional.
Nieva en la ciudad de los Césares como sofocaba el calor en Missisipi, pero el incordio meteorológico no puede encubrir los verdaderos dolores.
La dictadura coincide en 1976 con dos proyectos económicos montados sobre el turismo artesanal de la ciudad andina. El Cerro (Catedral) y el Lago (Nahuel Huapi) son los socavones sobre los que se montará la Industria. Parecía prometedor el “modelo de negocios”, frase noventista que sintetiza perfectamente lo que el General Suárez Mason armara con mascarones y testaferros en poco menos de tres años. Un modelo así demandaba blanquear la imagen de la ciudad. Cosa similar operaron los genocidas en las villas de la Capital Federal, como bien nos lo cuenta Eduardo Blaustein en “Prohibido vivir aquí”, operativo que significó la expulsión de 200 mil personas hacia el otro lado de la General Paz. De manera que está claro que el “mettier” tenía manuales. En Bariloche el confinamiento fue hacia el “Alto”, si bien hoy se lo ve, cerca del centro de la ciudad y fuera de los circuitos visitados por el turista. ¿Por qué fuera? Porque la vista de los aindiados desmejoraba “el producto”. ¿Por qué no lejos? Porque alguien tenía que poner las mesas, lavar los platos y hacer las camas, sacar la basura, limpiar los pisos….es decir, hacer el trabajo del servicio turístico. Hasta entonces las empresas familiares alcanzaban, pero con el “boom” industrial la proletarización era imprescindible. El quiebre coincide con una segunda ola migratoria desde los principales centros urbanos del país hacia la capital de Los Lagos. Entre 1976 y 1980 la población se duplica, y el crecimiento se hace sostenido hasta una meseta de 100 mil habitantes que puede establecerse intercensalmente entre 1985 y 1995. Bariloche se “babeliza”, un mix cultural que contiene desde pueblo originarios hasta progresismo jipón, nazismo de probeta con liberalismo conservador decimonónico hacen a un amplísimo espectro de rudimentos ideológicos. Quiero decir con esto que es y ha sido casi siempre, muy difícil hacerse entender en Bariloche. El sentimiento de pertenencia también es extraño, pero no por ello menos argentino. Con decirles que, al par de la Fiesta de la Nive que es siempre pretendidamente “ for export”, la otra fiesta popular importante es la de las colectividades Europeo- Argentinas, una fiesta en la todos se reunen para decir que vienen de otro lado, que no son de aquí.
Una sociedad así, tan a escala de la sociedad argentina, necesita fuertes redes políticas de contención, altos niveles de organización, y un modelo económico que integre, incluya y potencie materialmente lo colectivo. Adicionalmente la ciudad tiene, culturalmente, menos peronismo que la Recoleta.
Conservando el “modelo de negocios de la dictadura”, con el que la actividad económico dinámica que es el turismo sólo participa del 17 por ciento del PBI, Bariloche hace veinte años que está destinada al incendio.
Pero mañana Clarín, con sus voceros locales, dirá que este es un típico caso de inseguridad, consecuencia de la permisividad de un Gobierno Nacional garantista que tiene en el pobrerío la tropa criminal disponible para su eternización en el poder.
Como contrapartida le ofrecerán a la sociedad argentina las pócimas curativas de los Morales, Bulrrich, Cobos, Carrió, es decir los funcionarios funcionales de una política que abrió la puerta del infierno que generaron los otros, la secuela menemista de Duhalde, Sola, De Narváez, Macri y aínda mais. En la provincia y en Bariloche son otros los nombres, pero el Clarín sonará igual.

Tato Contissa, el Lunes, 21 de junio de 2010 a la(s) 22:31 ·

Ante tanto lameculos

Sergio Massa desnudo en sus convicciones por las infidencias del Wikyleaks, Alberto Fernández fotografiado una vez más con los factores de poder que lo sostuvieron en un cargo desde el que erosionó el poder del gobierno, Martín Lousteau principal responsable del mamarracho original de la 125 cuestionando la política económica del gobierno más exitosa que nunca. La lista se engrosa con tipejos curioso como Torcuato Di Tella, o algunos que no hablan pero se alían con el enemigo en el terreno de los negocios. No hay duda, la entereza ideológica de una gestión es directamente proporcional a la cantidad de traidores que es capaz de generar.

Como contrapartida otros se van del gobierno en silencio respetuoso y con la consideración de todos los hombres y mujeres de buena fe de adentro y de afuera. Bielsa, Taiana, para normar solo a algunos.

Es curioso que los más insignificantes sean los más traidores, esa es una relación que no alcanzo a poner en ecuación debidamente. Pero un cuatro de copas como Fernández, solo existente a partir de Kirchner, o un tecnócrata de vigésima línea como Lousteau, o un cajetilla trepador como Massa, seres de oscuras trayectorias se presentan como los más comprometidos con la insidia, la mendacidad y la rosca destituyente.

Para tener en cuenta, para que la presidenta tenga en cuenta, porque el costo político es de ella pero el costo social e histórico es el de todos los argentinos.

A este tipo de canalla no le interesa en absoluto otro destino que el de sus insignificantes vidas individuales. Siempre conviene detectarlos a tiempo.

Me tomo el trabajo porque tenemos un periodismo oficialista muy elegante cuando no timorato a la hora de poner estos puntos en papel, y contamos con unos intelectuales adeptos al gobierno que no quieren cruzar rubicones y entrar en la ciudad de la discusión armados. Yo no soy tan periodista como los primeros y he trabajado el pensamiento argentino como propio más que los segundos, de manera que soy el que se pone.

De manera que mire bien señora presidenta, que sus errores son los nuestros.

Tato Contissa, el Lunes, 6 de diciembre de 2010 a la(s) 21:01 ·

Andares compañeros

Yo no invito pero invito

a andar sin peros

compañera compañero

con el cansancio en ritmo

y el redoble de todos los pasos que se dieron.

Porque antes que nosotros estuvieron.

La marcha es ancha y el sendero angosto

como un desfiladero.

Son los riesgos de la historia

que se escribe sobre el suelo.

Me devoro los miedos mientras ando

y a todos los amores me los bebo

y solo necesito de tu marcha antigua

y contigua compañera compañero.

Marcha de  pueblo si las hay de viejas

de pueblo que no ceja y anda

cargándose los tiempos a la espalda

y cantando por delante de las rejas.

Libre de libertados conseguidas

por el amor y el imperio de la lucha.

Mucha libertad y digo mucha

porque decir toda no me alcanza

el pueblo avanza con la fervorosa furia de la vida.

Yo no invito pero invito a hacer destino

Necesito tus pasos marcándome la marcha

Compañera compañero sin demora

Miremos juntos y hagamos el camino.

Tato Contissa, el Martes, 18 de enero de 2011 a la(s) 0:33 ·

Alguien tiene que decirlo… y como siempre…

Hace seis años publiqué un trabajo que me llevó siete: Exhortaciones ante la Muerte del Periodismo, bajo el nombre de fantasía “Salven a Clark Kent”.

Allí se acuñaron ideas frases que hoy se usan con gratuidad de royalty como “periodismo hegemónico” o “sistema mediático concentrado”.

Sin embargo, nunca en todo el texto, hubo un planteo que se asimilara a una guerra interna entre grupos de empresas periodísticas, que es lo que se está dando, con la necesidad desesperada del Monopolio Clarín y  la especulación de un grupo de empresas disputantes de ese imperio con alianza táctica al Gobierno Nacional.

Todas esas empresas, hoy pro oficialistas, fueron partícipes del aquelarre post menemista de la Alianza consiguiendo perdón en la ignorancia y el descuido que los gobiernos peronistas suelen tener sobre los asuntos de la política de los medios y la gestión cultural, complejo de inferioridad que trato en otro lado.

Así las cosas, tropezamos hoy con la proscripción del peronismo en todos los medios del Estado, ya que no puede pretenderse que los medios de gestión privada abriguen a esos incordios que suelen tener palabra para lo que piensan mucho más que para lo que necesitan. De manera que podrá quien quiera revistar todos y cada uno de los segmentos periodísticos del espectro estatal de medios sin poder encontrar a ningún hombre que curse el peronismo siquiera culturalmente. Estaría mal si se tratase éste de un gobierno de otro signo, pero resulta horrible cuando es, como le es, de un auténtico gobierno peronista.

Bueno sería que pudiera argüirse la poca calidad de los profesionales que este cuño ideológico (digo el peronismo) puede ofrecerle a los medios, pero vista la lista de personalidades anodinas, profesionalidades chatas, y figurones de cartón piedra que ostenta la otra parte del espectro, ese argumento no puede lograr siquiera el asomo.

Muchos argentinos se sorprenden hoy con el supuesto trastorno de la posición de algunos periodistas venerados años atrás. Digo Lanata, Tenembaum o quien quiera que diga.  Se asombran de verlos jugados a favor de los monopolios, aún poniendo en duda sus convicciones democráticas y los blasones logrados “cuando era muy fácil hacer de progresista”. Prepárense todos a cualquier otra destreza de equilibrio del nuevo oficialismo si se llegara a dar la desgraciada circunstancia de una derrota electoral el año que viene. Ahí sí, comenzarían a vivir de periodismo pseudo opositor, revestidos de toda independencia como garantía de la diversidad del nuevo espectro y, las nuevas voces aparecidas al calor de estos días iniciales de la nueva ley de servicios de comunicación audiovisual, pasaríamos a habitar las catacumbas, una vez más. Porque claro, nosotros no cruzamos la calle, porque somos adoquines de esa calle, severos de convicciones y resignados a ser lo mejor de la historia o no ser nada.

Que eso no pase, es mi deseo. Pero mi deseo cumplido no va a evitar que se frustre por enésima vez la democratización de la palabra pública. Si lo que debe ser una apertura se convierte en el negocito de un par de productoras a favor del atontamiento que muestra la política de comunicación, estamos fregados. Muy fregados.

Tato Contissa, el Martes, 12 de octubre de 2010 a la(s) 23:16 ·

Al llegar

Todos los espacios y los tiempos que no hayan coincidido
Las oportunidades dispersas
Las diferencias del dolor y del trillar de la risa
Todas las angustias aquí y los festejos de otra parte
Cada una de las ingratitudes y los cientos de lealtades
Las penas apagadas y las euforias sudorosas
Las plumas de los sueños y las guerras de las rocas
Los milagros y las derrotas previsibles
Las angustias y el estrellar de copas
Todo será un instante fundante rompiendo los relojes
Todo será un segundo de viento vigoroso
Todo será un diástole de lunas en los soles
Todo será un destello cuando me encuentre con tu boca
Tato Contissa, el Domingo, 28 de noviembre de 2010 a la(s) 19:45 ·

Descubriendo El Colón

Al colón!! Al Colón!! Así canta la tribuna popular consagrando lo que no nació sino a espaldas de lo popular…”El Colón”….. Y contra ese desprecio e invisibilidad institucionalizada igual, este pueblo generoso fue capaz de una admiración apropiada sobre algo que le era vedado…ajeno…impropio…. prohibido. La impronta de las patas en la fuente del 17 es siempre referida al revés, porque la irreverencia estaba instituida por las rémoras del país del centenario, toda vez que los cabezas no podían circular por las zonas “blancas” circunscriptas de la ciudad. La indumentaria era entonces la excusa para implementar el derecho de admisión a todos los paseos citadinos que habían sido construidos o remozados para el Centenario. De allí lo revulsivo de los descamisados.
La verdad es que la primera noticia de un artista popular que haya pisado el Colón es la de la Negra Sosa en los albores de la democracia recuperada.
Y la pregunta cae desde su peso no asumido…. ¿es el Colón un emblema de la argentinidad?….y de cual argentinidad? …la del centenario?…
En el centenario el proyecto de la Argentina pastoril y del modelo agroexportador satelital a la política británica en el mundo hacía su autoglorificación. La prensa, la escuela y la tribuna afianzaron la idea de eternidad de ese diseño.
Los fastos del Centenario fueron con todo el oropel imaginable. Esos festejos y su relato, constituyen la consagración misma del modelo político, económico y social de la “oligarquía vacuna”. Un país que alcanzaba el “éxito” sobre la base del fraude electoral, la democracia ficticia, y la resignación de un desarrollo propio al modelo económico de Gran Bretaña debía sostener y profundizar su sistema consagrándolo ritualmente.
Veinte años después, la indignidad y la pequeñez de ese destino pretendido se derrumbaban para siempre. En 1930 la el proyecto colonial queda sin destino y solo atina a colgarse de la mustia teta del imperialismo decadente en posiciones oprobiosas como las que emblematiza el tratado Roca-Runciman .
Es el Colón emblema de eso?
O la voz de las multitudes la ha puesto en un sitial de excelencia para todo lo que sea argentino motivo de orgullo? Al Colón!! Al Colón!! Para Gardel, Maradona, Fangio…Leloir… o ese del barrio que nos hace a todos los del barrio sentir que el barrio es una usina de talento y de belleza.
Y viste como son las cosas no? Una pregunta trae a la otra y así…a otra que no se pensaba podía ser preguntada…¡Es la argentinidad de mayo la misma que la del centenario? A cuál de las dos se parece más ésta, la de ahora, la argentinidad del bicentenario?…. una Argentina que se piensa para todos los argentinos y para Amèrica Latina.. ¿cuál es más al palo…para parafrasear a la Bersuit?
Y el Colón….a cual de las tres argentinidades le corresponde ser emblema?
Mucha pregunta para un país que, a veces, se tapa los ojos de banderas para no ver al país real.
Lo bueno de la Argentina de hoy es que es la que es…y se promete como hacía tiempo que no se prometía, ser la que queremos ( al menos las mayorías) la que debe ser.
Pero habrá que hablarlo…habrá que animarse a hablarlo…porque, mal que nos pese somos occidentales en una gran parte….y lo mismo indios…por lo que la palabra….desde el principio mismo del mundo, la palabra…es lo que nos va a salvar…
Por eso yo no iría al Colón hasta tanto no se me aclare de qué Argentina quiere ser emblema.

Tato Contissa, el sábado, 22 de mayo de 2010 a la(s) 15:05 ·

Domingo K, Lunes P

La lucha después del voto

El domingo voto K para que desde el gobierno se hagan cargo de que no sólo hay que hacer presente al Estado ausente, sino que hay que desarrollar políticas formativas de recursos humanos desde las universidades nacionales para que ese Estado se nutra de manos y cabezas eficientes para el proyecto nacional. Los voto y los obligo.

El domingo voto K para que terminen de darle vueltas al plan energético y lo pongan a jugar en esa idea de país dónde nadie se quede afuera de la producción, del consumo y de la vida.

El domingo voto K para que liberen la palabra pública del corsete que le han puesto los grupos concentrados, más allá de los negocitos que algunos ranfañosos de ese mismo gobierno tienen con los “hadades” y los “clarines” de este país cuasi silenciado. Los voto y los comprometo a la Ley que reemplazará a la de la dictadura y a la que SOLO ESTE GOBIERNO se animó a presentar.

El domingo voto K para que hagan la reforma impositiva, graven las transacciones financieras, bajen el IVA y hagan de la imposición una herramienta para el diseño del modelo productivo de la Argentina en función de la región. Los voto para que se alejen de las influencias de los amigos de ocasión que cantan como las sirenas desde los riscos de los noventa.

El domingo voto K para que la Argentina no pierda el sendero emprendido en 2003 y profundice y acelere la transformación, es decir para que se termine con la tibieza de los tibios, las mezquindades de los mezquinos, y las avaricias de los oportunistas, y para que jueguen los hombres y mujeres realmente comprometidos con el proyecto nacional y popular.

El domingo voto K para derrotar a los que ya fracasaron y se esconden detrás de la desmemoria y de los afeites mediáticos. Pero el lunes empezamos la lucha contra los que frenan desde adentro lo que no posible, ni justo, ni decente demorar más.

Tato Contissa, el jueves, 25 de junio de 2009 a la(s) 21:13 ·

Distracciones traicioneras

 Mientras de manera sibilina los voceros de los grupos económicos no se distraen en su afán de torcer el rumbo de a política argentina, una esforzada operación de sinécdoque conceptual se intenta sin éxito en un rincón del espacio kirchnerista. Lo mejor, en cualquier caso, es que la presidenta Cristina Fernández e Kirchner lleva la disputa importante (la primera) al centro del mundo y marca una distintiva comprensión de la crisis internacional y de la forma de enfrentarla.

Algunos referentes del progresismo con genética de izquierda decimonónica hacen verdaderas contorsiones en el esfuerzo por sintetizar el nuevo espacio político de la Argentina a partir de la muerte de Néstor Kirchner. El deseo de librarse de la incomodidad que les produce el peronismo nos ofrece la oportunidad de decir alguna cosa que nos parece pertinente para tener presente en esta hora, y para ayudar, porque todos esos esfuerzos y esas capacidades innegables hacen falta para otro propósito que es el de consolidar el proyecto en marcha.

La esforzada operación de sinécdoque conceptual consiste en un intento de reducir la nueva totalidad del espacio kirchnerista con el solo aditamento de ese sector del progresismo. Vieja idea de la parte haciéndose del todo.

Las referencias son inequívocas en este sentido, parece ser que la política de derechos humanos del gobierno,  y las inclusiones de causas de nuevas minorías son, en muestra de biopsia, prueba irrefutable de esta redefinición, y de la naturaleza resignificante de ese progresismo.

El peronismo no debería tener que  desempolvar sus fueros en estos territorios pero bueno es recordar que la incorporación de las mujeres al sufragio, la ley de divorcio, y otras extensiones del derecho político en la Argentina constituyen parte de su itinerario histórico. La expansión del derecho ha sido en los últimos 65 años obra pura del peronismo. Desconozco que existan organizaciones del tipo de “Putos socialistas”, “Putos comunistas” o “Putos radicales”, siendo que si han dado pruebas de valía militante los “Putos peronistas” quienes integran de manera protagónica el nuevo extenso paisaje juvenil del espacio kirchnerista. Desde esa definición política se acompañan a las organizaciones libres que las minorías sexuales se han sabido dar en el país.

En realidad resulta claro que este intento está buscando una solución para algunos intelectuales mucho más que para los propios hombres y mujeres del progresismo que ya están absolutamente consustanciados con el nuevo espacio. Siempre vivir es previo a cualquier decir de la vida.

Tener que encontrar la explicación de por qué el kirchnerismo no es ya peronismo, por qué el peronismo ha muerto con la muerte de Néstor Kirchner, por qué el progresismo ahora sí puede ingresar en el campo nacional y popular una vez hecha la limpieza conceptual del peronismo, es parte de la ingeniería de absurda abnegación que se despliega en estas horas.

La verdad es muy otra, el progresismo y la izquierda decimonónica le han aportado poco y siempre tarde al movimiento nacional y popular de la Argentina, con lo que no es de esperar que califique para factor dinámico en la transformación de un espacio político tan central. Pero advierto que no es posible prescindir de ellos, porque el kirchnerismo es este momento actual del peronismo, o si se quiere, la actualidad del movimiento nacional y popular, y estos sectores son parte integrada y requerida del kirchnerismo.

Pero podemos sacar provecho del observar estas razones y estos esfuerzos, porque lo que se busca muchas veces en nuevos lugares se encuentra acuñado en el espíritu histórico del pueblo. En primer lugar decir por qué razón el peronismo es generalmente incómodo en una descripción que agregue algo a su consabido ser “el hecho maldito de la Argentina burguesa”.

Los intelectuales en general y los intelectuales progresistas en particular saben que el pringue peronista te relega en la cátedra, te quita de la prensa reputada, te confina a suburbios editoriales y te desmejora la reputación académica, científica y profesional. Los intelectuales peronistas no somos aceptados como serios, aunque le hayan dado muchos de ellos al país lo poco de pensamiento genuino que se generara en el siglo XX, y esto en virtud de la sistemática persecución, ocultamiento y negación que el establishment cultural de la Argentina le ha practicado desde 1955 hasta el presente. Muy pocos obedientes a la máquina de disciplinar de ese establishment se terminan revelando, como digo poco y tarde, pero al menos al fin. Caso emblemático de estas rebeliones es Ernesto Laclau. Otros, como Nicolás Casullo han oxigenado a toda una generación que quería pensar por sí misma y situados como lo ordenaba la reveladora doctrina de Rodolfo Kusch. Pero en general, la subordinación era el tono de la melodía y el peronismo como fuente de pensamiento o lo que colindara con él debía ser relegado a la categoría del graznido.

Más estos son tiempos diferentes. Cuando comprobamos que la derecha argentina sufre pauperismo intelectual y que apenas supera la tilinguería de un Rotzinger, o el balbuceante discurso prepolítico de Macri podemos afirmar que lo único con lo que cuenta el país como pensamiento proyectado es lo que puede ofrecerle el campo nacional y popular. De manera que para que perder el tiempo en una discusión endogámica innecesaria?

Por qué importa hacer esta aclaración? Porque el conservadurismo no duda jamás en disfrazarse con las ropas de los movimientos populares, y mientras algunos se distraen en la búsqueda de perfecciones teóricas, estos grupos apelan a la estética para, apoderados de la apariencia, restaurar el orden conservador rediseñado a partir de 1976. Lo hacen groseramente, porque han perdido el estilo. Lo que no han perdido es la conciencia clara de sus propios intereses que siempre van a contramano de los intereses de la Nación.

El que se distrae pierde, hace perder y sin querer, traiciona. No nos podemos distraer.

Tato Contissa, el Lunes, 10 de enero de 2011 a la(s) 14:06 ·

Desde una pampa de cruces

Trabajo dando mis impresiones sobre lo que ocurre en tanto cuento lo que ocurre, a mi manera, con mis miradas sesgadas y mis limitaciones y talentos. No transfiero realidades ni las impongo a las audiencias. Soy periodista, un trovador desafinado del siglo XXI. La profesiòn a la que adscribo a mutado a un hato de pistoleros que, con el taco de la bota puesto sobre el cadàver del periodismo, simulan la santidad donde hay prostituciòn, verdad donde mendacidad, justicia donde impunidad, abnegaciòn dònde mesquinos e inconfesables intereses.
Feliz dìa del periodista….sobre las cruces de su cementerio.

Tato Contissa, el sábado, 5 de junio de 2010 a la(s) 16:42 ·

La música es la vida que ha decidido sonar en todos lados

La música conoce nuestra historia

Ha modulado penas y sonado en las heridas

Ha hecho tintines en los tintines de la risa

y ha puesto prisa y freno

a lo bueno y sentido de la vida.

 

La música ha acompañado

pero también ha sido guía,

escuela,

de todo lo que adentro vuela.

con pluma de alma y ala colorida.

 

La música ha conseguido su lágrima y su beso

la excusa del amor que los cuerpos acuerdan en los cuerpos

y la nota final del muerto amado

La música trae pasado

y nos empuja a los soles cada día

La música es la vida

que ha decidido sonar en todos lados.

 

La música señera, veloz y lerda

marca de pueblo, de Nación y patio

Cuerda que tensa la batalla

y ata el reposo del amante

y hacia adelante nos empuja

con voz y con silencios que nos canten.

 

Tato Contissa, el Lunes, 22 de noviembre de 2010 a la(s) 10:26 ·